Avance en la vacunación contra el dengue en PBA

Este martes 29 de octubre, el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires inicia una nueva fase de la campaña de vacunación contra el dengue, enviando turnos a través de correo electrónico para aquellos que cumplan los requisitos específicos.

¿Quiénes pueden vacunarse en esta etapa?

La campaña está dirigida a personas de entre 15 y 59 años que hayan contraído dengue en algún momento entre 2023 y 2024. Es fundamental, además, que los destinatarios vivan en algún municipio de la región metropolitana de Buenos Aires. La aplicación de esta vacuna busca reducir el riesgo de casos graves, internaciones y mortalidad por dengue, destacando su alta eficacia en la prevención de cuadros severos.

¿Quiénes pueden vacunarse en esta etapa?

La campaña está dirigida a personas de entre 15 y 59 años que hayan contraído dengue en algún momento entre 2023 y 2024. Es fundamental, además, que los destinatarios vivan en algún municipio de la región metropolitana de Buenos Aires. La aplicación de esta vacuna busca reducir el riesgo de casos graves, internaciones y mortalidad por dengue, destacando su alta eficacia en la prevención de cuadros severos.

Importante: si tuviste dengue recientemente, deberás esperar seis meses antes de aplicarte la vacuna. Para embarazadas, personas en lactancia, inmunocomprometidas o en tratamiento con quimioterapia o corticoides en altas dosis, la vacuna está contraindicada.

Dónde vacunarse: consulta los centros de vacunación oficiales

Los centros de vacunación están distribuidos en toda la Provincia, y cada persona recibirá la dirección específica del centro asignado. Para obtener una lista completa de los centros oficiales, ingresá al portal del Gobierno bonaerense (www.gba.gob.ar/dengue) o llamá al número gratuito 148, donde podés recibir orientación y consultar dudas adicionales sobre la campaña.

El impacto de la vacuna: protección y reducción de síntomas

La vacuna Qdenga, utilizada en esta campaña, ofrece una protección alta para evitar formas graves de la enfermedad y hospitalizaciones. Aunque en menor medida, también ayuda a reducir la intensidad de los síntomas en caso de una nueva infección, lo cual resulta fundamental para evitar complicaciones durante las temporadas de brotes.