Chivilcoy solicitó la declaración de emergencia agropecuaria

El gobierno de Chivilcoy solicitó al Ministerio de Desarrollo Agrario de Buenos Aires la declaración de emergencia y/o desastre agropecuario para todo el partido, debido al exceso de lluvias de los últimos meses, que provocó inundaciones, anegamientos de lotes, daños en cultivos y dificultó tanto el acceso a los campos como el manejo de animales y maquinaria.

Este pedido —firmado por el intendente Guillermo Britos— se gestionó en el marco de la Comisión de Emergencia Agropecuaria, en una solicitud impulsada junto con organizaciones locales como la Asociación Rural, INTA, APPIC, CECOINSE, AIACA y el Concejo Deliberante.

Ezequiel Pinotti, secretario de Gobierno, afirmó que el evento climático “fue extraordinario” y que, según el INTA, en mayo cayeron 200 mm en tan solo dos días (15 y 16 de mayo), alcanzando casi 400 mm en el mes, cuando el promedio histórico es de 74 mm. Además, en cinco meses precipitó casi lo que suele llover en todo el año (cerca de 960 mm).

Juan Ignacio Curcio, director de Producción, explicó que el procedimiento consta de varias fases: primero el pedido de declaración, luego la evaluación de una Comisión Provincial y, en casos anteriores, se han dispuesto prórrogas de vencimientos de tributos y facilidades de crédito para los damnificados.

Juan Pablo Cileiro, presidente de la Asociación Rural, agradeció la intervención del Municipio pero también advirtió que “el sector enfrenta daños críticos en cultivos, animales y maquinaria”, solicitando tanto medidas de alivio como la reconsideración de nuevos tributos en plena emergencia.

Romina Paola De San Celedonio, jefa de AER Chivilcoy (INTA), confirmó que 17.000 hectáreas están afectadas, tanto de agricultura como de ganadería. La soja de segunda, en particular, enfrenta daños debido a que la cosecha estaba retrasada cuando ocurrieron las lluvias.

Este procedimiento permitirá implementar medidas de apoyo, como prórroga de vencimientos impositivos o facilidades financieras, así como gestionar junto con bancos y organismos específicos nuevos mecanismos de alivio para los sectores más golpeados.